Ir al contenido principal

LA PACIENCIA CON LOS MALVADOS


Vivimos en medio de los malvados, pero es diferente nuestra vida; hay una distinción oculta y una separación que no aparece; como están los granos en la era, no como en el granero.
No te separes, no te dividas: ¿Eres trigo? Sufre la compañía de la paja hasta que legue el tiempo de la limpia.

Del ‘Kempis agustiniano’Dominus Est. 5 de mayo de 2019

Es manifiesto que muchos que se dicen fieles no viven como tales ni sus costumbres están en armonía con la gracia que recibieron. Alaban al Señor con la boca, pero le ultrajan con su vida.
Es también cierto que entre el número de estos fieles andan muchos como granos perdidos entre un montón de paja y que, como granos, soportan el trillo en la era; pero se consuelan con la esperanza de ser recogidos en el granero.
Estas son las dos clases de hombres que constituyen la Iglesia de Dios.
En la Iglesia reconocemos la era del Señor, donde tendrá lugar la separación el día del juicio; allí deseamos pertenecer después de la resurrección al montón de trigo y anhelamos ser llevados al granero de la vida eterna.

En el cielo no habrá paja, como en el infierno no habrá trigo.

La separación entre los buenos y los malos tendrá lugar el día del juicio; entonces habrá una separación verdadera y cesará la mezcla de ahora.
También al presente estamos separados, ni no por el lugar, al menos por las costumbres, los sentimientos, las aspiraciones, la fe, la esperanza y la caridad.
Vivimos en medio de los malvados, pero es diferente nuestra vida; hay una distinción oculta y una separación que no aparece; como están los granos en la era, no como en el granero.
En la era, los granos están mezclados y separados: separados, porque ya están desgranados de la espiga; mezclados, porque aún no han sido separados de la paja.
En el día del juicio la separación será manifiesta a todos; como lo fue la de las costumbres, lo será entonces la de la vida, y como ahora la hay de las almas, la habrá entonces de los cuerpos.
En el día del juicio el fuego precederá al Juez, y a su alrededor se formará una gran tempestad.
Esta tempestad arrebatará toda la paja de la era, y el fuego destruirá todo lo que el viento haya arrastrado.

No te separes, no te dividas¿Eres trigo? Sufre la compañía de la paja hasta que legue el tiempo de la limpia.
¿Deseas ser separado de la era? Mira que fuera de la era te distinguirás como trigo y estarías expuesto a que los pájaros te comiesen.

Además, ten presente que por el hecho de poder ser llevado por el viento y volar, manifestarías que eras paja; y siendo tan ligero, vendría el viento y te arrastraría de entre los pies de los bueyes que trillan.

image

Los que verdaderamente son trigo, soportan con la paja la trituración, y mientras se congratulan de ser grano, gimen entre la paja, en espera del aventador, que saben es su verdadero libertador.
Por tanto, para que puedas llegar al reino de la inmortalidad, procura permanecer en la era con el peso de la caridad.
Oye lo que dice el Señor:
“Yo juzgo entre oveja y oveja y entre carneros y cabritos”.

¿Qué hacen aquí los cabritos en el rebaño de Dios? Se alimentan de los mismos pastos y beben en las mismas fuentes; y aunque destinados a la izquierda, se mezclan con los que estarán a la derecha; y si bien son ahora tolerados, serán después separados, ejercitando, entre tanto, la paciencia de ovejas, que imitan el ejemplo de la paciencia de Dios.
Dios, pues, hará la separación de los otros a la derecha.

Ahora que Dios calla¿tú desearías hablar?

Y ¿de qué, pregunto, querrías tratar? Precisamente de lo que Él calla, esto es, de la venganza del juicio, no de la invitación a la enmienda.

¿Quieres separar cuando todavía no separa Él?

Tolera Dios que viva mezclado todo lo que sembró y te empeñas tú en limpiar el trigo antes que esté en sazón, sin darte cuenta de que, con el aire que tú puedas darle, quedará muy mal limpio y separado.
Disgustados los criados al ver la cizaña, y doliéndose de que estuviese mezclada con la buena semilla, dijeron al dueño: ¿No sembraste buen grano en tu tierra? ¿De dónde procede esa cizaña?
Contestó dando explicación de la existencia de la cizaña, pero no les permitió arrancarla hasta que llegase el tiempo oportuno.
Aunque dichos criados estaban indignados contra la cizaña, sin embargo, solicitaron un consejo y un mandato de su señor.
Les desagradaba, es cierto, verla mezclada con el trigo, pero comprendían, como buenos siervos, que si por propia iniciativa se resolvían a arrancar la cizaña, serían ellos contados entre la mala hierba.
En previsión de ello esperaron el precepto del dueño y pidieron instrucciones a su señor: ¿Quieres que vayamos a arrancarla? No, fue la respuesta, y les indicó la causa de la negativa: No sea que al arrancar la cizaña, arranquéis juntamente el trigo.
Así como calmó la indignación de los criados sin dejarlos descontentos. Grave cosa les parecía que hubiera cizaña en el trigo, y grave era sin duda alguna; pero una cosa es la condición del campo y otra el descanso del granero.

Sé tolerante, puesto que para eso has nacido; sé tolerante, porque quizá tú también has sido tolerado.
Si fuiste siempre bueno, sé misericordioso, y si alguna vez fuiste malo, no pierdas la memoria.

¿Quién hay que sea siempre bueno? Si Dios te examinase a fondo, le sería más fácil encontrarte aun ahora malo que a ti demostrar que has sido siempre bueno.
Por tanto, hay que tener paciencia con la cizaña entre el trigo, con los cabritos entre las ovejas y con los malos entre los buenos.
Pasará la mezcla del campo, y vendrá la separación en el tiempo de la siega.
Ahora quiere el Señor que, a su ejemplo, ejercites la paciencia, diciéndote: «Si yo quisiera juzgar con toda rectitud ahora, ¿correría peligro de ser engañado?
Pues si yo que juzgo siempre rectamente, y que no puedo equivocarme, difiero de mi juicio, tú, que ignoras cómo has de ser juzgado, ¿tendrás atrevimiento para juzgar a la ligera?»
30e6b05dc3eb894af8fcb409e26d2b38

Repara cómo, deseando los criados arrancar la cizaña antes de tiempo, no les permitió el dueño hacerlo ni aun en el tiempo de la siega. Cuando llegue, dice, el tiempo de la cosecha, mandaré a los segadoresNo dijo: «Os mandaré a vosotros».
Y después, explicando la parábola, añadió: Los segadores son los ángeles.
Y tú, cargado con el peso de tu carne, y que acaso eres todo carne, es decir, carne en cuanto al cuerpo y carnal por el espíritu, ¿te atreverás a usurpar un derecho que corresponde a otros y que ni aun durante la siega estará reservado para ti?
¡Oh, vosotros, que, siendo pocos entre muchos, vivís bien y pasáis la vida suspirando y gimiendo entre ellos! Pasará el invierno y llegará para vosotros con el verano la hora de la siega; y entonces vendrán los ángeles, que pueden separar el bien del mal sin riesgo de equivocarse.
Nosotros somos siervos, no segadores; nosotros somos hombres, y los segadores son los ángeles.
Nosotros también seremos segadores si como ángeles de Dios concluimos nuestra carrera; pero al presente, cuando nos enojamos por la compañía de los malos, aún somos hombres.

Por tanto, el que cree estar en pie, tenga cuidado de no caer.

¿Pensáis que esta cizaña no sube hasta las sillas episcopales? ¿Pensáis que solamente se la encuentra abajo y nunca en las alturas? ¡Ojalá que no subiera! Digoos de verdad que en lo alto del santuario hay también cizaña y trigo; como en el valle hay cizaña y trigo.
Toleren los buenos a los malos y los malos enmiéndense e imiten a los buenos.
Pertenezcamos todos a Dios, si puede ser, y esforcémonos por acercarnos a su misericordia, huyendo de la malicia de este siglo.
Busquemos los días buenos, ya que vivimos días malos; procuremos vivir bien estos días malos, para que podamos llegar a los días buenos.


Transcripción de Dominus Est.
*permitida su reproducción mencionando a dominusestblog.wordpress.com

Comentarios

Nuestras publicaciones

¿Qué significa las letras JHS?

ROSARIO POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO (DICTADO POR JESÚS)

9 Frases y pensamientos para Corpus Christi

HORA SANTA DE REPARACIÓN MARIANA

¿Por qué Jesús eligio a Pedro?

Coronilla de las Almas del Purgatorio Santa Gertrudis

Comentario 22 de Diciembre del 2017: El humilde agradece, el soberbio se resiste.

Bienvenido Mayo

Ser pobre en el corazón, esto es santidad: Comentario 22 de Junio del 2018

CORONA FRANCISCANA DE LOS 7 GOZOS