Introducción al Concilio Vaticano II
apologeticacatolica.org La idea de celebrar un concilio ecuménico, o de proseguir y concluir el Vaticano I, estuvo ya en la mente de algunos papas, como Pío XI (1922-1939), que en los años 1923-1924 consultó al episcopado sobre este particular. También Pío XII (1939-1958) volvió sobre el mismo asunto, llegando incluso a crear comisiones preparatorias, pero en ambos casos la idea no cristalizó en un proyecto concreto. Con la llegada de Juan XXIII (1958-1963) al solio pontificio se produce un cambio importante, ya que a los tres meses de su elección —el 25 de enero de 1959— hizo en Roma el anuncio oficial de la convocatoria de un concilio ecuménico. Contó con más representación de todos los concilios ecuménicos, pues asistieron unos 2.540 padres conciliares (con una media de asistencia de unos 2000)procedentes de todas las partes del mundo y de una gran diversidad de lenguas y razas. Fue por tanto el más grande en cuanto a cantidad (Calcedonia 200; Trento 950) y en cuanto a cat