40 días por la vida Uruguay - Día 32



Cuarenta días por la vida
13 de febrero al 24 de marzo 2018
Día 32, viernes, 16 de marzo de 2018

«Lamentablemente, una gran parte de la sociedad actual se asemeja a la que Pablo describe en la Carta a los Romanos. Está formada «de hombres que aprisionan la verdad en la injusticia» (1, 18): habiendo renegado de Dios y creyendo poder construir la ciudad terrena sin necesidad de Él, «se ofuscaron en sus razonamientos» de modo que «su insensato corazón se entenebreció» (1, 21); «jactándose de sabios se volvieron estúpidos» (1, 22), se hicieron autores de obras dignas de muerte y «no solamente las practican, sino que aprueban a los que las cometen» (1, 32). Cuando la conciencia, este luminoso ojo del alma (cf. Mt 6, 22-23), llama «al mal bien y al bien mal» (Is 5, 20), camina ya hacia su degradación más inquietante y hacia la más tenebrosa ceguera moral».
San Juan Pablo II, encíclica Evangelium vitae 24

Motivación
La nota más saliente de la cultura de la muerte es la ideología de género
Recientemente, en el Parlamento escuchamos atónitos como los impulsores de la ideología de género negaban su filiación con ella y hasta su misma existencia. «Nosotros no nos sentimos representados por ninguna ideología de género», decían mientras votaban un proyecto de ley que la trasuntaba de principio a fin y que la imponía en la educación. «La ideología de género no existe». Otros matizaban: «se trata solo de una perspectiva».
¿Por qué ese empeño tragi-cómico en negarle a la ideología de género su carácter de ideología? ¿Será porque, de reconocerlo, se caería de maduro que ni el Estado ni la educación la pueden adoptar sin violar su laicidad?
Errores y confusiones que pueden llevar a preguntarnos: ¿es la llamada perspectiva de género una ideología o tan solo una teoría o perspectiva? En definitiva, ¿qué es una ideología?
Reflexión
Qué es una ideología
Según J. A. Widow, una ideología es:
«Un sistema cerrado de ideas que se postula como modelo según el cual ha de reestructurarse toda la vida humana en sociedad [...]. Se lo concibe independientemente de la realidad [...]. No está condicionado por la realidad concreta, sino que es la realidad la que debe ser definida como tal por la ideología. Y, una vez establecido el modelo, su objetivo es el de ser aplicado a la vida humana como un molde en el cual está todo comprendido. Es [...] un proyecto que define qué y cómo ha de ser esa realidad: por esto, no necesita de la experiencia, sino del poder».
Podemos también recurrir a la definición de Marx: 
«Sistema coherente de ideas sin fundamento real que es sostenido para defender determinados intereses».
O, como explica Massini-Correas en su libro El renacer de las ideologías:
El de las ideologías es un modelo de pensamiento por el que se pretende alcanzar un conocimiento emancipador, destinado a revolucionar la sociedad haciéndola eterna y completamente libre, igualitaria y feliz. Tiene un carácter simplista y maniqueo, decididamente agonal o beligerante y radicalmente racional-constructivo, sin referencia alguna a la experiencia de las cosas humanas.
Una de sus notas estructurales radica en que, al igual que para los gnósticos, la presencia del mal en el mundo no se debe, como lo sostiene el cristianismo, a un pecado o una falta moral del hombre, sino a una defectuosa estructura del cosmos y de la sociedad.
Las ideologías pretenden ser una explicación completa y simple de las realidades humanas, que reducen todas las dimensiones y problemas de la vida a una causa única y excluyente: sea esta la posesión exclusiva de los medios de producción económica, o la mezcla de las razas, o la autoridad tradicional de la Iglesia y de la monarquía, o la dependencia del imperialismo, o la desigualdad social, [o «el patriarcado»], en todos los casos existe una causa única de todos los males y su remoción o transformación radical significará necesariamente la emancipación humana de todo mal posible.
Este único factor del desorden y del mal en el mundo ha de ser objeto de una guerra total y absoluta, de un enfrentamiento decisivo y sin límites. «Una ideología –ha escrito Olivier Reboul– se impone no por razones y pruebas, sino por una cierta coacción, desde la seducción a la violencia, pasando por la censura y la disimulación de los hechos». Pero, además, al ser tan completa, absoluta y permanente la perfección que se espera [en el caso de la ideología de género, una sociedad sin sexos y, por lo tanto, sin desigualdades], y los enemigos de la acción ideológica tan perversos y despreciables [los que sostenemos que la heterosexualidad es la norma], la actividad que conduce a la concreción de la ideología carece de límites éticos o institucionales. El único principio ético y jurídico válido es el logro del fin intentado y cualquier medio será adecuado –y moralmente válido– para su consumación. La historia reciente está repleta de masacres multitudinarias realizadas para alcanzar la sociedad sin clases, el reino ario de mil años o la liberación del imperialismo norteamericano.
Una nota decisiva de la mentalidad ideológica es su desprecio por la experiencia de las cosas humanas. En el esquema ideológico se han eliminado todos aquellos elementos —v. gr. el estado radicalmente defectivo de la naturaleza humana— que puedan impedir la realización del ideal definitivo de la sociedad perfecta del futuro. Y si en algunos casos se tienen en cuenta los datos de la realidad, será solo con carácter instrumental-estratégico, con la finalidad de alcanzar mediante la astucia algún objetivo determinado.
El pensamiento ideológico pretende privar de todo límite lo que en la experiencia aparece como intrínsecamente limitado. En palabras de Paul Tillich, la ideología representa «un juicio sobre la extrema pecaminosidad del presente, o de un grupo social, o de un pueblo, o de una religión, y un intento de salir de esa situación, pero no dice cómo es posible esto habiendo un extrañamiento radical».
Finalmente, pretende secularizar lo trascendente, apropiándose de conceptos propios del orden religioso. En este sentido, tiene razón Helmuth Kuhn cuando dice que «donde Dios es expulsado, hacen su entrada los dioses y los ídolos: y "los dioses tienen sed". El ser rebelado, que se separa de la fe trasmitida, ante la angustia de que su existencia carece de suelo firme en que apoyarse, trasmite la pasión de su angustiada fe y de su entrega a la acción por un reino de este mundo: el Estado, que él quiere crear [...]: el cielo sobre la tierra como meta de la actividad política...». Este cielo sobre la tierra [en nuestro caso, una sociedad sin violencia ni desigualdad porque ya no existirán ni el varón ni la mujer] es la tarea propia del revolucionario y la ideología es la directriz y guía de la revolución; y el resultado es siempre una tragedia.
¿Teoría, perspectiva o ideología de género?
Existe una extraordinaria confusión sobre el significado de la ideología de género: algunos la entienden como una inocua sustitución del concepto gramatical de sexo, masculino y femenino; otros la conciben como un feminismo que busca la relación de equidad entre hombres y mujeres, pero en realidad se trata de una ideología política, como puede serlo el marxismo o el comunismo, que persigue el poder y la hegemonía cultural y social.
Surge de un planteamiento que destruye el concepto objetivo de naturaleza humana. Niega toda verdad a otras concepciones, a las que persigue por medio de la censura, la represión, la descalificación personal y mediática. Promueve el camuflaje de las causas económicas de la desigualdad, y corroe el significado de ser humano.
No es un feminismo porque no contempla a la mujer real (el concepto mismo de «mujer» es lo que uno quiera que sea), ni se preocupa por la situación de equidad de todas ellas. Así, los dos colectivos más numerosos, las madres y las viudas, nunca han formado parte de sus reivindicaciones, pero sí la proporción igualitaria en las listas electorales, con independencia de cualquier otro criterio. Sólo le interesa la mujer en la medida que se ajuste a su teoría, que tiene como referencia el conflicto con el hombre heterosexual, en un remedo de la lucha de clases.
A la perspectiva de género no le interesa la equidad real. Manipula la realidad para presentar a nuestra sociedad como patriarcal, y falocrática (sic), dominada por los machos heterosexuales. Pero ignora aspectos tan decisivos para la persona como la esperanza de vida y la educación, porque hay muchas más tituladas universitarias que varones por debajo de los 35 años, más ninis masculinos que femeninos, muchos más suicidios, repetidores, abandono y fracaso escolar entre los chicos, que en las chicas. Introduce un planteamiento falseado de la equidad, al diluir las causas económicas y educativas de la desigualdad en el «conflicto de género», es decir, el conflicto entre la «clase mujer», homosexuales, bisexuales, etc., contra la «clase macho heterosexual».
Es, por tanto, las tres cosas: una teoría, ya que es unaconstrucción racional, abstracta; una perspectiva, porque es una cosmovisión del hombre y del mundo; y ante todo una una ideología, porque constituye un cuerpo de ideas estructurado sistemáticamente, dogmático, totalitario y utópico, basado en un presupuesto básico falso, que se acepta acríticamente; «crea la realidad», es decir, noparte de la realidad, pero intenta transformarla.

Intención del día
Ante la necedad del mundo, pidámosle al Espíritu Santo que ilumine las conciencias, que disipe las tinieblas del error de nuestra inteligencia, para que podamos ver la Verdad y el Bien.
Oración para todos los días
ORACIÓN POR LA VIDA
Oh María, aurora del mundo nuevo,
Madre de los vivientes,
a Ti confiamos la causa de la vida:
mira Madre el número inmenso de niños a quienes se impide nacer,
de pobres a quienes se hace difícil vivir,
de hombres y mujeres víctimas de violencia inhumana,
de ancianos y enfermos muertos a causa de la indiferencia o de una presunta piedad.
Haz que quienes creen en tu hijo sepan anunciar con firmeza y
amor a los hombres de nuestro tiempo
el Evangelio de la vida.

Alcánzales la gracia de acogerlo como don siempre nuevo,
la alegría de celebrarlo con gratitud durante toda su existencia
y la valentía de testimoniarlo con solícita constancia,
para construir, junto con todos los hombres de buena voluntad,
la civilización de la verdad y del amor,
para alabanza y gloria de Dios Creador
y amante de la vida.
Amén.
San Juan Pablo II
Encíclica Evangelium Vitae sobre el Valor y el Carácter Inviolable
de la Vida Humana.

Comentarios

Nuestras publicaciones

¿Qué significa las letras JHS?

ROSARIO POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO (DICTADO POR JESÚS)

9 Frases y pensamientos para Corpus Christi

HORA SANTA DE REPARACIÓN MARIANA

¿Por qué Jesús eligio a Pedro?

Coronilla de las Almas del Purgatorio Santa Gertrudis

Comentario 22 de Diciembre del 2017: El humilde agradece, el soberbio se resiste.

Bienvenido Mayo

Ser pobre en el corazón, esto es santidad: Comentario 22 de Junio del 2018

CORONA FRANCISCANA DE LOS 7 GOZOS