Los uruguayos rezaron por la patria
icm.org.uy
Católicos, cristianos y judíos se reunieron en la Catedral y pidieron por el futuro del país
El Card. Daniel Sturla recibe al presidente Luis Lacalle Pou en la Catedral /F, GUTIÉRREZ
El Arzosbispo de Montevideo, Card. Daniel Sturla, fue anfitrión de una ceremonia organizada junto con iglesias cristianas y la colectividad judía en la que se rezó por el país, en el comienzo de un nuevo gobierno. En los primeros bancos se encontraban el presidente Luis Lacalle Pou y sus principales asesores, así como fieles de los distintos credos representados. Además de rezar, muchos aprovecharon para saludar al mandatario en su primer día de gestión.
La Iglesia Matriz abrió sus puertas a personas de la fe judía -acompañados por los rabinos Max Godet y Daniel Dolinsky-, de la Iglesia Anglicana del Uruguay representada por el Obispo Daniel Genovesi, la Iglesia Evangélica del Río de la Plata -representada por el Pastor Jerónimo Granados- y la fe cristiana en diversas expresiones, representada por el Pastor Pedro Lapadjian.
El Card. Sturla explicó: “Recemos por la patria e invoquemos a Dios misericordioso para que bendiga a sus gobernantes. Rezamos porque somos hombres y mujeres de esperanza. Porque amamos la patria y deseamos para todos los orientales y todos los que viven en este suelo lo mejor: una sociedad más digna, más justa. Por eso invocamos a Dios nuestro Señor”.
En las primeras 14 filas del templo estaban las autoridades nacionales, embajadores, miembros de la Comunidad Judía y de iglesias cristianas. En uno de los costados, otros obispos católicos: Pablo Jourdan y Luis Eduardo González (auxiliares de Montevideo), Milton Tróccoli (Maldonado, Rocha y Minas), Alberto Sanguinetti (Canelones), Pedro Wolcan (Tacuarembó y Rivera) y Rodolfo Wirz (emérito de Maldonado). Y en toda la catedral, varios cientos de personas. En su mayoría eran católicas y cristianas, pero también se distinguían algunos judíos que llevaban kipá.
Tanto católicos como cristianos y judíos comparten el Antiguo Testamento, por lo que todos vivieron como propia la lectura del primer libro de los Reyes.
Luego fue el momento de los mensajes religiosos. Primero habló el Rabino Dolinsky, quien prometió a los gobernantes su compromiso permanente y aporte responsable y honesto. Luego les dirigió una bendición en hebreo. El Pastor Jerónimo Granados hizo varias referencias a las palabras del presidente Lavalle Pou ayer al asumir. En tercer lugar habló Mons. Arturo Fajardo, presidente de la Conferencia Episcopal del Uruguay, obispo de San José. "La política es la más preciosa forma de la caridad porque busca el bien común, el bien social (...). Busquemos construir puentes", indicó.
El ensemble vocal e instrumental De Profundis interpretó entonces el tema "Ubi caritas et amor", de Durufle. Las voces ayudaban al clima de oración, que algunos seguían con los ojos cerrados.
El obispo Daniel Genovesi, de la Iglesia Anglicana del Uruguay, introdujo lo que seguiría, el encendido de velas, una por cada denominación religiosa representada. Y luego intervino Pedro Lapadjian, quien se refirió al Padre Nuestro.
Entonces todos se pusieron de pie y entonaron el rezo de esa oración que une a católicos y cristianos. Al terminar hubo un aplauso espontáneo y apretado. Luego los judíos tuvieron su momento de oración, guiados por el rabino Max Godet, quien también hizo sonar el shofar. El momento concluyó con otro aplauso igual de sentido.
Los siete líderes religiosos se pusieron de pie y extendieron sus manos para impartir la bendición final, que estaba inspirada en un texto del libro de los Números. A cada invocación, los fieles respondían con un “Amén”.
“Que el Señor los bendiga y los guarde.
Haga brillar su rostro sobre ustedes y les conceda su favor.
Vuelva su mirada sobre ustedes y les conceda la paz”.
Haga brillar su rostro sobre ustedes y les conceda su favor.
Vuelva su mirada sobre ustedes y les conceda la paz”.
Comentarios
Publicar un comentario